Gestión inteligente del agua: La base del riego sostenible
Autor: André Guilherme Rego - Data: 23/05/2025
Con el avance del cambio climático y la creciente demanda mundial de alimentos, la gestión eficiente de los recursos hídricos se ha vuelto esencial para garantizar la sostenibilidad de la producción agrícola. En este escenario, el regadío juega un papel estratégico. Sin embargo, para que sea eficaz y sostenible, debe planificarse sobre la base de criterios técnicos y jurídicos, respetando los límites medioambientales y garantizando la disponibilidad de agua para las generaciones futuras.
El riego como aliado de la productividad
El riego es uno de los principales insumos agrícolas y contribuye significativamente a aumentar la productividad en el campo. Sin embargo, su puesta en práctica exige no sólo invertir en infraestructuras, como pivotes centrales, sistemas de goteo o aspersión, sino también prestar atención a la legislación medioambiental, especialmente en lo que respecta al uso del agua.
Licencias de uso del agua: ¿Qué es y por qué es necesaria?
Uno de los principales requisitos para el uso racional y legal del agua es la concesión del derecho de uso de los recursos hídricos. Se trata de una autorización concedida por las autoridades públicas que garantiza al usuario -un productor rural, una industria u otra empresa- el derecho a utilizar un determinado volumen de agua de ríos, lagos o acuíferos subterráneos para fines específicos, como el riego.
La concesión es un instrumento de gestión previsto en la Política Nacional de Recursos Hídricos (Ley Federal N.º 9.433/1997) y en la Política de Recursos Hídricos del Estado de Minas Gerais (Ley N.º 13.199/1999), y está reglamentada en el Estado por el Decreto N.º 47.705/2019 y la Ordenanza N.º 48/2019 del IGAM.
Es importante destacar que la concesión no transfiere la propiedad del agua al usuario, un recurso natural inalienable, sino que confiere el derecho de uso condicionado a su disponibilidad. Así, en caso de escasez, incumplimiento de las condiciones legales o necesidad de priorizar el abastecimiento humano, la concesión puede suspenderse total o parcialmente.
Estudios técnicos: las bases para un uso sostenible del agua
La concesión de licencias y el uso consciente del agua en el regadío dependen directamente de estudios técnicos que evalúen la disponibilidad y sostenibilidad del recurso hídrico. Dos de ellos son fundamentales en este proceso:
Estudio hidrogeológico
El objetivo de los estudios hidrogeológicos es evaluar la situación de los manantiales subterráneos en una región determinada. Proporciona una visión integrada de la calidad y cantidad de agua disponible en los acuíferos, lo que permite una planificación eficaz y segura del uso de las aguas subterráneas.
Los principales componentes de este estudio incluyen:
Cartografía de manantiales subterráneos;Elaboración de mapas potenciométricos;Definición de los parámetros hidrodinámicos de los acuíferos;Zonificación de áreas con potencial de explotación hídrica;Identificación de zonas susceptibles de contaminación antropogénica;
Estudio sobre la disponibilidad de agua
El estudio de disponibilidad de agua se centra en evaluar las aguas superficiales y subterráneas de una región, teniendo en cuenta factores como la estacionalidad, la variabilidad climática y el impacto ambiental. Aporta datos para dimensionar el uso del agua de forma equilibrada, ayudando a evitar conflictos entre usuarios y a garantizar la sostenibilidad de las masas de agua.
Este estudio incluye:
Análisis histórico de los pozos de la región;Recogida de datos sobre la calidad del agua;Análisis geológicos e hidrogeológicos;Estudios geofísicos para la perforación de pozos;Diseño y ejecución de pozos artesianos;Análisis de aguas en laboratorio;Trámites para la obtención de licencias
Planificación y control: caminos hacia la sostenibilidad
Los conocimientos técnicos que aportan estos estudios permiten planificar mejor el uso del agua, reducir el consumo excesivo y promover una mayor eficiencia energética. También ayuda a identificar las zonas de conservación, controlar la calidad del agua y cumplir los requisitos legales.
Con este fin, se han puesto en marcha iniciativas de seguimiento sistemático de los recursos hídricos en varias regiones del país. Contribuyen a crear una base de datos histórica y fiable que sirve de apoyo tanto a la planificación hídrica de las propiedades como a la solicitud o renovación de licencias de agua.

La gestión inteligente del agua es hoy una de las principales claves del futuro de la agricultura de regadío. Combinar tecnología, conocimientos técnicos y respeto a la legislación medioambiental es esencial para garantizar no sólo la productividad, sino también la preservación de uno de los recursos más valiosos del planeta. El regadío sostenible empieza por un agua legalizada, controlada y bien planificada.
Fuentes:
El riego por goteo subterráneo revoluciona la producción de café y caña de azúcar en el norte de ES
Energía solar en el riego: ventajas y técnicas para el futuro del paisajismo y la agricultura
Meliflor lanza tres nuevos medidores para optimizar el uso del agua y del suelo

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