Conozca la importancia de la agricultura de regadío

Autor: Gabriella Turolla - Data: 14/08/2023

La agricultura de regadío juega un papel crucial para garantizar la seguridad alimentaria en muchas partes del mundo, pero también presenta desafíos como la gestión sostenible de los recursos hídricos, el control de la salinidad del suelo y el equilibrio entre la cantidad de agua suministrada y las necesidades reales de las plantas, esta es una práctica esencial para aumentar la producción de alimentos en regiones donde la disponibilidad de agua es limitada. Es un método que consiste en el suministro controlado y artificial de agua a las plantaciones, asegurando su crecimiento y desarrollo incluso en períodos de escasez de lluvias.

Maximización de la productividad

Con el avance de la tecnología, los agricultores tienen acceso a sistemas de monitoreo que ayudan a determinar la cantidad exacta de agua necesaria para cada cultivo, minimizando el uso excesivo. Además, técnicas como la recolección y reutilización del agua de riego pueden contribuir a la conservación de los recursos hídricos. A partir de esto es posible contribuir a mejoras en la eficiencia del riego y en el seguimiento del estado de los cultivos, permitiendo un uso más preciso del agua y reduciendo los residuos.

En un escenario de cambio climático, las precipitaciones se vuelven cada vez más impredecibles. La agricultura de regadío juega un papel vital en el suministro de agua a medida a las plantas, independientemente de las fluctuaciones climáticas. Esto asegura que los cultivos tengan acceso constante al agua, mitigando los impactos de sequías prolongadas y lluvias irregulares.

Conservación de los recursos hídricos mediante métodos de riego

Existen varios sistemas de riego, cada uno con sus ventajas y desventajas. El sistema de riego por inundación, por ejemplo, consiste en aplicar agua directamente al suelo a través de bandejas o cuencas, pero se debe tener cuidado con este tipo de riego para que el agua no se detenga y se convierta en un caldo de cultivo para las larvas de mosquitos.

Otro ejemplo es el sistema de goteo que libera agua directamente sobre las raíces de las plantas, minimizando así los residuos, el uso de este método permite hasta un 95% el uso de agua.

Sin embargo, es importante señalar que el riego inadecuado puede conducir a problemas como la salinización del suelo y el desperdicio de agua. Por lo tanto, es esencial adoptar prácticas sostenibles, como la gestión eficiente de los recursos hídricos, la elección adecuada de los sistemas de riego y el monitoreo constante de las condiciones del suelo y los cultivos.

Garantizar la seguridad alimentaria

Uno de los mayores beneficios de la agricultura de regadío es su capacidad para ofrecer estabilidad en la producción de alimentos. Si bien las lluvias impredecibles pueden provocar malas cosechas e inseguridad alimentaria en muchas regiones, el riego permite a los agricultores controlar el suministro de agua, disminuyendo la dependencia de las condiciones climáticas naturales. Esto es especialmente crucial en lugares donde la sequía o las variaciones climáticas extremas pueden conducir a la escasez de alimentos.

La diversificación de los cultivos que es posible gracias al riego también contribuye a la seguridad alimentaria. Con la capacidad de elegir entre una variedad de cultivos, los agricultores pueden equilibrar los riesgos asociados con enfermedades, plagas. Además, el riego permite crecer durante diferentes estaciones del año, aumentando la producción total de alimentos.

Se concluye que la agricultura de regadío juega un papel vital en la producción de alimentos en áreas con limitaciones de agua, pero su uso responsable y sostenible es esencial para garantizar la productividad agrícola y la preservación del medio ambiente. Por lo tanto, invertir en investigación, educación y tecnologías innovadoras para mejorar la práctica del riego es esencial para garantizar un suministro continuo de alimentos de calidad.